sábado, 7 de mayo de 2016

Mucho en qué pensar...

¡Hola, buen día!
Nuestra situación actual es critica y preocupante, durante años hemos gastado los recursos naturales sin preocuparnos por la Tierra, ni por otras especies, ni por la nuestra.
La mayoría de los de nuestra especie ni siquiera tiene idea del peligro en el que nos encontramos. Viven pensando solo en el hoy y no saben que el mañana que nos espera es peor de lo que estamos viviendo. Debemos preocuparnos por instruirnos para saber qué es lo que estamos viviendo y cómo evitarlo.
Hay que tomar en cuenta diferente aspectos para poder lograr el equilibrio por el cual muchos ya están luchando. Se tiene que dar a conocer que hay más de una forma  de poder ayudarlos.

Foto de www.ecoportal.net
Podemos empezar mencionando que necesitamos proteger los recursos naturales necesarios para la seguridad alimentaria y energética. Hay que tomar en cuenta que los recursos naturales constituyen el potencial básico para el desarrollo del territorio. Tenemos que tomar en cuenta el ámbito ecológico en nuestras decisiones políticas  para que nosotros, como sociedad, tengamos la obligación de cuidar nuestros recursos para nosotros y posteriores generaciones. Debemos mantener tener bien presente la capacidad de la naturaleza para absorber y recomponer la influencia que nosotros le provocamos. Cada ecosistema tiene una capacidad de carga máxima, es decir, el número máximo de personas que pueden ser soportadas por los recursos de un territorio, ésto nos permite evaluar los límites máximos del crecimiento de una determinada población y así poder saber que tan rápido pueden lograr la sustentabilidad, para que se sepa el rendimiento máximo que puede dar cada recurso sin poner en riesgo su futuro. Los factores contaminantes también entran en la capacidad de carga, de ellos se mide que tan rápido se pueden absorber antes de que sean irremediablemente alterados.

Gran número de personas ocupa recursos que ni siquiera necesita, de esto nos habla el ámbito social,  el cual nos permite diferenciar entre el impacto que genera una sociedad desarrollada o una subdesarrollada. La primera, como ya se menciono, ocupa recursos que probablemente no necesite y en la segunda es la pobreza la causa primaria de la subutilización de los recursos naturales y de  situaciones de ausencia de cobertura de las necesidades básicas que dan lugar a problemas como la deforestación, la contaminación o la erosión de los suelos. Debemos tener en cuenta que hay que promover un nuevo estilo de desarrollo que favorezca el acceso y uso de los recursos naturales y la preservación de la biodiversidad y que sea socialmente sustentable en la reducción de la pobreza y de las desigualdades sociales y promueva la justicia y la equidad; que sea culturalmente sustentable en la conservación del sistema de valores, prácticas y símbolos de identidad que, pese a su evolución y reactualización permanente, determinan la integración nacional a través de los tiempos; y que sea políticamente sustentable al profundizar la democracia y garantizar el acceso y la participación de todos en la toma de decisiones públicas.

El debate de la economía en el medio ambiente es uno de los que ha suscitado las polémicas más arduas en términos de su relación con la sustentabilidad. Se ha señalado con razón que aún la ciencia económica no tiene una respuesta convincente a la crítica ecológica. La economía falla al valorar la riqueza global de las naciones, sus recursos naturales y especialmente los precios de las materias primas. Por ejemplo, si nos referimos al precio de los recursos energéticos agotables, es evidente que su valoración siempre es menor que la real en términos de su preservación para las futuras generaciones. También es posible cuestionarse si el precio que las industrias tienen que pagar por insertar residuos no reciclados al ambiente tampoco sea el racional. Entonces, cuáles serán los precios adecuados. Aquí se incorpora usualmente la noción de externalidades como los aspectos ambientales que no tienen valoración cuantitativa en la contabilidad o en el proceso de producción. De allí la importancia de valorizar los recursos al menos por su costo de reposición y construir con ellos por ejemplo, cuentas del patrimonio natural para saber qué y cuánto tenemos, cómo lo podríamos usar en diferentes alternativas y cuánto nos queda en cada caso.

La evolución de la sociedad hacia estilos de producción y consumo sustentables implica un cambio en el modelo de civilización hoy dominante, particularmente en lo que se refiere a los patrones culturales de relación de la sociedad y la naturaleza. “La adecuada comprensión de la crisis supone pues el reconocimiento de que ésta se refiere al agotamiento de un estilo de desarrollo ecológicamente depredador, socialmente perverso, políticamente injusto, culturalmente alienado y éticamente repulsivo. Lo que está en juego es la superación de los paradigmas de la modernidad que han estado definiendo la orientación del proceso de desarrollo. En ese sentido, quizás la modernidad emergente en el Tercer Milenio sea la `modernidad de la sustentabilidad´, en donde el ser humano vuelva a ser parte de la naturaleza”.


Siéntete libre de dejarnos tus comentarios, tu opinión nos interesa.

2 comentarios:

nickwam dijo...

El medio ambiente no es una entidad ajena a los seres humanos: los seres humanos formamos parte de él. Gracias al medio ambiente tenemos aire qué respirar, agua con la cual abastecernos, materias primas para su transformación a través de la industria (todos los aparatos y comodidades que de manera tan despreocupada utilizamos a diario son producto de procesos industriales más o menos elaborados, efectuados sobre material extraído de.... la naturaleza), y finalmente, alimento (no creerás que el filetote que te comiste y la ensalada con la que lo acompañaste vienen del supermercado ¿verdad?). Si seguimos impulsando un modelo de consumo como el actual, en el que los insumos que empleamos (energía y recursos extraídos de la naturaleza) son mayores a lo que la propia naturaleza puede reponer, simplemente estaremos enfrentando nuestra extinción.
Paz, conocimiento y buena fortuna.

Anónimo dijo...

me parece un muy buen post y creo que tenemos que actuar mas rapido si no queremos que nuestra especie y las demas desaparezcan yo hago lo que puedo por ayudar al planeta y me interesan este tipo de cosas